Hoy cocino yo: Muffins de cacao y fresas

Ultimamente me estoy dedicando mucho a los muffins (más adelante os cuento el por qué), así que entre tanta prueba he preparado estos muffins de cacao y fresas que están de muerte, perfectos para chocoadictos....




Cuando hace unos días os di la receta de los muffins de calabaza os conté que los preparo para congelarlos y que mi hija tenga siempre un muffin fresco para llevarse de merienda a la escuela. Para que no se aburra voy probando recetas diferentes, y estos muffins de cacao y fresa le han encantado.

Como variante usé por primera vez la nata agria, y debo decir que les da un toque apenas ácido y salen muy esponjosos. Probablemente el buttermilk sea más indicado, pero en mi super encontré la nata así que la usé, y salió muy bien. Si no encontráis ninguna de las dos cosas, podéis usar yogur griego.

Vamos a ello entonces. Hoy estrenamos un nuevo modo de presentar las recetas, mucho más visual y gráfico, que ya sabéis que en realidad lo nuestro es eso, la cocina es solo un hobby ;) Pero contádnos por favor a ver si os gusta:

Cómo hacer muffins de cacao y fresa

En un recipiente mezclamos todos los ingredientes secos: la harina, el azúcar, la sal, el cacao y el polvo leudante. En otro recipiente batimos el huevo, la mantequilla (recordad que debe estar derretida pero tibia), la nata agria, la leche y el extracto de vainilla, hasta tener una mezcla homogenea.

Cortamos las fresas en cubitos pequeños (si estaban congeladas las dejamos descongelar un poco antes) y los mezclamos con una cucharada de harina.

Agregamos la preparación líquida a la seca, mezclando con una cuchara de madera hasta que esté homogéneo. Agregamos las fresas y mezclamos poco y con cuidado, para no romperlas. 

Distribuimos la mezcla en los moldes de muffins o pirotines, llenando ¾ y presionando un poco con una cuchara para que no queden bolas de aire. 

 Cocinamos en horno precalentado a 180 grados por aprox. 35–40 minutos, depende del tamaño de los muffins.

Retiramos del horno y dejamos enfriar en el molde.

Tienen un gusto intenso a chocolate, con el ligero sabor ácido que le dan las fresas, que por cierto si queréis podéis no usarlas y hacer muffins de cacao sin más.

Si sois choco adictos, no os perdáis el pastel inteligente de chocolate y café. 

Disfrutad del finde!

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