Hoy cocino yo: Mermelada de manzanas y ciruela

Hoy prepararemos una riquísima mermelada de manzana y ciruela, de forma muy fácil y sobre todo en muy poco tiempo!

¿Quieres saber cómo? No te pierdas la entrada de hoy.

Siempre me ha gustado hacer mermeladas caseras pero al final desistía de la idea por el largo tiempo que hay que estar en la cocina, muchas veces sin conseguir luego el resultado deseado.

Con esta receta conseguimos un resultado genial y con muy poco tiempo!

Vamos a ello.

Como preparar mermelada casera de manzana y ciruela

Ingredientes (para dos frascos)

500 gr manzanas

300 gr ciruelas (puede ser otra fruta también)

Agua (cantidad necesaria)

200 gr azúcar (yo prefiero las mermeladas ácidas, podéis poner más si os apetece)

zumo de 1 limón

Preparación

Primero cortaremos las manzanas en rodajas, con todo y cáscara y las ciruelas (peladas) en trozos, y las cocinaremos en una olla con un dedo de agua (no tiene que cubrir la futa) hasta que ésta se consuma.

Luego licuaremos la fruta, agregaremos el azúcar y el zumo de limón y cocinaremos a fuego medio durante 15 minutos, revolviendo frecuentemente.

“La prueba de la cucharita”

Para saber si nuestra mermelada está “a punto”, haremos una sencilla prueba.

Cogeremos un poco de mermelada con una cucharita, la haremos enfriar y cuando la pongamos en un plato la mermelada no se tiene que derramar.

Aunque esto depende de la consistencia deseada, nos sirve para comprobar que sea la que sea, la hayamos conseguido. Apagamos el fuego y echamos la mermelada caliente dentro de los frascos de cristal previamente esterilizados (podéis ver cómo se hace aquí). Los tapamos bien y los giramos, apoyándolos sobre la tapa, y los dejamos enfriar así. Cuando la mermelada esté completamente fría, ya se puede consumir. No puedo deciros si se conserva durante muchos meses porque en casa no ha durado tanto, ¡a ver si alguna amiga especialista me da una mano en esto!

Mermelada expres

Lo que hace que esta mermelada sea tan fácil y rápida de hacer es que la manzana contiene pectina, una fibra natural que se encuentra en la piel de muchas frutas y unida al ácido de la fruta y el azúcar forma un gel. Lo que conseguimos es espesar de forma natural la mermelada, añadiendo menos azúcar y sobre todo disminuyendo el tiempo de cocción.

¿Que os ha parecido? ¿Os animáis a hacerla en casa? Para un desayuno completo podéis acompañarla con este delicioso pan de grasa.

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¡Qué aproveche y buen finde!